CRÍTICAS de ESTRENOS: "GAGARINE"
CRÍTICAS de ESTRENOS: "GAGARINE". Una despedida intergaláctica
"Gagarine es un cautivador homenaje a la historia y a un pueblo. Un adiós fuera de este mundo... unos cimientos que recordarán a cada uno de ellos"
Escrito por: Luis Varela
Dirección: Fanny Liatard, Jérémy Trouilh
Guion: Jérémy Trouilh, Benjamin Charbit, Fanny Liatard
Música: Amin Bouhafa, Evgueni Galperine, Sacha Galperine
Fotografía: Victor Seguin
Reparto: Alseni Bathily, Lyna Khoudri, Jamil McCraven, Finnegan Oldfield, Farida Rahouadj, Denis Lavant
Distribuidora: Karma Films
Género: Drama
Fecha de Estreno en Cines: 13 de Abril
Yuri de 16 años ha vivido siempre en las Torres Gagarine en las afueras de París y sueña con ser astronauta. Cuando se entera de los planes para demoler todo el bloque de apartamentos, Yuri se embarca junto a sus amigos Diana y Houssan en una misión para salvar el edificio, transformándolo en su peculiar «nave espacial» antes de que desaparezca en el espacio para siempre. La película fue rodada en colaboración con todos los residentes reales de las torres, en el momento álgido del conflicto sobre la demolición del proyecto de viviendas Cité Gagarine, en Ivry-sur-Seine.
Escrito por: Luis Varela
A pesar de saber que las cosas tienen un fin, nos cuesta desapegarnos de ellas. Aferrados a la mínima posibilidad, mantenemos nuestra esperanza que aquello siga con nosotros. Buscamos desesperadamente prolongar su existencia en nuestras vidas, aunque esto solo retrase lo inevitable. El pasado vivido y el presente desvaneciéndose nos hacen olvidar el futuro. No obstante, hay quiénes, ante esta situación, miran más allá del lamento y deciden decir adiós. Despedirse sin olvidar y mirando hacia el por venir.
Gagarine es una película de origen francés y el primer largometraje de los directores franceses Fanny Liatard y Jérémy Trouilh. En ella seguimos la historia de Yuri (Alseni Bathily), un adolescente aficionado por el espacio deseoso de ser astronauta que vive en la Ciudad Gagarin, un proyecto de viviendas creado en los años 60 en el país galo. Ante la inminente demolición del complejo por su deteriorado estado, Yuri buscará la manera de salvar su hogar.
Gagarine es un film que tiene muy presente su fin, el de rendir homenaje a la sociedad que hacía vida en aquellas torres. Liatard y Trouilh se apoyan en imágenes de archivo, en puntuales intervalos del metraje, para contrastar que la vida en este complejo y la idiosincrasia de sus habitantes ha permanecido a través de los años. La Ciudad Gagarin es un personaje y esta es su historia.
A pesar de que Yuri es la resistencia ante el fin del complejo, es el mismo personaje que permite la catarsis para Ciudad Gagarin. Por medio de su deseo por la vida en el espacio, un ingenioso detalle hacia el cosmonauta Yuri Gagarin, quién da su nombre a la ciudad, el adolescente nos permite reflexionar sobre la utopía de nuestros anhelos y la realidad a nuestro alrededor.
Entre la ficción con extractos de documental, el drama con toques surreales y de ciencia ficción, lo macro de su mensaje y el mundo de sus personajes, Gagarine es un cautivador homenaje a la historia y a un pueblo. Un adiós fuera de este mundo, donde su legado permanecerá en la vida de cada habitante de aquel complejo, y unos cimientos que recordarán a cada uno de ellos.
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