GAMER REVIEW: COPYCAT (Playstation 5)
GAMER REVIEW: COPYCAT
"un viaje felino hacia la identidad, la pérdida y el amor incondicional"
Título Original: Copycat
Desarrollador: Spoonful of Wonder
Publisher: Tesura Games
Clasificación por edades: PEGI 12
Género: Aventura Gráfica
Fecha de Lanzamiento en formato físico: 29 de Agosto de 2025
Plataformas formato físico: Playstation 5
REVIEW
Hay juegos que te atrapan por su jugabilidad y otros que lo hacen por lo que te hacen sentir. Copycat, desarrollado por el pequeño pero talentoso estudio Spoonful of Wonder, pertenece a ese segundo grupo. Es un título que no busca que domines mecánicas complicadas ni te sumerjas en combates épicos; su meta es más simple, pero también más profunda: ponerte en la piel —o mejor dicho, en el pelaje— de un gato que lucha por recuperar su lugar en el mundo.
Una historia más humana de lo que parece
La historia arranca con Dawn, una gata rescatada que es adoptada por Olive, una mujer mayor que intenta llenar un vacío en su vida. Lo que parece el inicio de una convivencia tierna y tranquila pronto se complica: un segundo gato aparece en escena y, poco a poco, se adueña del cariño y la atención de Olive. Dawn pasa de ser el centro del hogar a sentirse una extraña… una "copiada", una intrusa en su propio cuento.
Detrás de esta premisa sencilla se esconde un relato que habla del duelo, la identidad, el amor y la soledad, todo narrado con una delicadeza que solo los estudios indie parecen atreverse a explorar. Copycat es un espejo de lo que somos cuando perdemos algo querido, y cómo proyectamos ese vacío en los demás —en este caso, en nuestros animales.
Jugar con la calma de un gato
La jugabilidad es sencilla, casi minimalista, pero coherente con la propuesta. Caminas, observas, hueles, maúllas e interactúas con objetos que ayudan a construir la historia. No hay acción, ni puzles complicados: es una experiencia narrativa en la que lo importante es el viaje emocional.
Mover a Dawn se siente natural; sus animaciones son suaves, su forma de explorar el entorno transmite curiosidad y vulnerabilidad a partes iguales. A veces basta con quedarte mirando por la ventana o acurrucarte junto a Olive para entender que este juego no va de hacer cosas, sino de sentir lo que es ser un gato querido… y después, un gato olvidado.
Arte que acaricia la vista
Visualmente, Copycat es una pequeña joya. El juego apuesta por una estética cálida, íntima y con un aire otoñal que encaja a la perfección con su tono melancólico. Los escenarios —casas, jardines, callejones— están llenos de detalles, y la iluminación juega un papel clave para reforzar cada momento emocional.
La banda sonora acompaña con sutileza: melodías suaves de piano, cuerdas que se asoman solo cuando es necesario y silencios que dicen más que muchas palabras. Todo encaja en una atmósfera tranquila, a veces triste, pero siempre reconfortante.
Breve, pero con alma
En unas 2 a 4 horas, Copycat te cuenta su historia y se despide. No hay relleno ni misiones secundarias, solo una experiencia directa y emocional que deja poso. No es un juego para rejugar —sus decisiones no cambian drásticamente el final—, pero sí para recordar, especialmente si alguna vez has tenido una mascota que te cambió la vida.
Spoonful of Wonder demuestra que no hacen falta grandes presupuestos para tocar la fibra. Copycat no pretende competir con títulos como Stray o Little Kitty, Big City en lo técnico; su campo de batalla es el emocional, y ahí sale ganando.
Un pequeño estudio con gran sensibilidad
Lanzado primero en PC y más tarde en consolas, el título llega bien optimizado a PS5, con traducción al español (latino) y soporte para 4K. Se nota el mimo detrás de cada detalle: desde los menús simples hasta las animaciones felinas que transmiten personalidad y carácter.
Sí, tiene sus limitaciones: jugabilidad escasa, decisiones que apenas alteran la historia y una duración breve, pero cuando lo terminas, no piensas en eso. Te quedas con la historia de Dawn, con su mirada, con ese sentimiento de pérdida que todos, en algún momento, hemos sentido.
Conclusión: una historia que araña el corazón
Copycat es una carta de amor al vínculo entre humanos y animales, pero también un retrato sobre la identidad y la necesidad de sentirse querido. Es corto, sí, pero intenso y sincero. Uno de esos juegos que te deja pensando más de lo que esperas cuando pulsas "Comenzar".
Si te gustan las experiencias narrativas como What Remains of Edith Finch o Spiritfarer, aquí encontrarás un nuevo título para añadir a tu lista. Y si además eres amante de los gatos, prepárate: este juego te va a doler… pero de la mejor manera posible.
Puntuación: 8/10
Un juego pequeño, emocionalmente enorme






Post a Comment